¡ PANAMÁ… LA PATRIA MÏA !
MENSAJE #14
-¡Disfruta
cada video! ¡Regresa enseguida al mensaje y que sea de bendición!
¡En este mes de
la Patria, dedico unos versos de mi inspiración a esta
tierra hermosa que amo!
De mi poema “Pro Mundi Beneficio”:
Eres musa que duerme entre dos mares
con tu cuerpo de esbelta cordillera
mientras la brisa teje con azahares
un lazo en tu cintura canalera.
El Salmo 144 habla de las bendiciones de Dios para sus hijos. Que
nuestros hijos crezcan robustos y sabios con todo tipo de abundancia en sus
hogares y concluye diciendo: “Bienaventurado el pueblo que tiene esto;
Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es Jehová”. Y es que ya lo había cantado en
el Salmo 133 “Dios mío, tú bendices al pueblo que te reconoce como Dios. Tú
bendices a la nación que te acepta como dueño”.
Reconocemos y respetamos los mandatos del Dios Altísimo, por eso Él
tiene sus ojos y oídos atentos a su pueblo. ¡Panamá es un país bendecido por su
posición geográfica, su clima, su configuración, su vegetación, sus mares y sus
fuentes de agua dulce, su flora y su fauna!
Históricamente ha sido considerada “tacita de oro” por su riqueza. ¡Dios
nos ama!
Los hijos de esta tierra van dejando su
aroma de amistad y de alegría por donde quiera que ellos pasan y Dios nos abre
puertas en el mundo que Él creó para que dejemos un buen testimonio.
En medio de tanta bendición, nuestro suelo gime por el pecado que daña
sus entrañas, que aleja de Dios a muchos panameños y extranjeros que llegan a
nuestro suelo y viven al margen de los preceptos y deseos del Creador de esta
hermosa y pródiga tierra. Pero, siempre
estamos a tiempo de recapacitar, de corregir, de restaurar. Lo que no podamos
hacer con nuestra fuerza lo podemos poner en manos del que “todo lo
puede”. ¡No hay nada difícil para Dios!
¡Dios bendiga a Panamá y a todos los que la habitamos!
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