¡CEGUERA
DE AMOR!... ¿EXISTE?
MENSAJE # 42
-¡Disfruta
cada link! ¡Regresa al mensaje y que sea de bendición!
¡Cuántas personas ciegas de
nacimiento! Y a cuántos, una enfermedad o un accidente, les roba la visión. Es triste
no poder ver lo que nos rodea: un amanecer, una flor, el mar, el cielo o una
persona amada. A pesar de ello hay quienes,
como José Feliciano, estando ciego de la vista, tiene el ánimo de cantar: “allá
en la eternidad, al fin podré mirar mi pedacito de cielo”…
¡Existe otra ceguera! La
ceguera de los que teniendo los ojos sanos, NO aprecian lo que sus ojos ven.
¡La ceguera del alma! ¡No aprecian el incalculable valor de una sonrisa, de una
mirada de amor o de una caricia!... Ataread@s en los afanes
de la vida, no se enteran que el amor “estuvo” o “está” a su lado, esperando
recibir su limosna. ¡Paralizan al amor con la ceguera que seca al corazón y causa
daño!
Un invidente apreciaría ver
con sus ojos, lo que “el ciego espiritual” no aprecia ver con su alma. Con ojos
espirituales de amor; una madre ama al hijo a pesar de su mala actitud o su defecto;
los hermanos y amigos se comprenden y se perdonan; y el hogar se llena de la
gloria de Dios.
¡Jesús es la “luz” para la
ceguera de los ojos y del alma! ¡Su consultorio está siempre abierto, con un
enorme letrero: “GRATIS”! Es el mejor psicólogo, médico, abogado y consejero. ¿Por
qué seguir siendo ciegos? ¡Jesús quita la ceguera, liberta el espíritu y abre
los ojos espirituales para que podamos entender su mensaje!... ¡Es complicado, sí
lo es! Pues nos auto convencemos diciendo “Yo… yo ando bien”, “No tengo
problemas con Dios”, “No me meto con nadie ni hago daño a nadie”, “Vivo mi vida y dejo vivir”...
Saulo de Tarso, el gran “San
Pablo”, mi admirado personaje de la pluma y la predicación buscó también
justificación para lo que hacía en contra de los cristianos hasta que oyó la
voz de Jesús, a quien nunca conoció físicamente, y cayó a tierra, ciego… Pablo
tenía ceguera espiritual y Dios le añadió la ceguera de sus ojos. Así entendió que
no era como él decía, ni cómo él quería, sino como decía y quería Dios. Entonces,
(dice la Biblia) “se cayeron las escamas de sus ojos”. Y cuando recobró la
vista espiritual, recobró también la visión de sus ojos.
¡Dios misericordioso, a
pesar de haber tenido yo, muchas veces ceguera espiritual, no me has quitado,
como a Saulo, la vista de mis ojos!
¡Hazme ver siempre, en qué te estoy fallando! ¡Apúrate a corregirme!
¡Que cuando tenga que dar cuenta de mis palabras y mis actos; sea acepta a ti y
pueda vivir en tu eternidad!
¡He visto al que muere! ¡Atrapad@ en ese sueño
del que nadie despierta! ¡L@ sacuden, le hablan, y lloran
a su lado pidiéndole: “despierta” “no te vayas”! ¡Pero se ha ido y ha seguido
“dormido”! ¡La muerte apaga los ojos, cierra
la puerta de la vida y trae la ceguera final!... ¡Jesús, tú enfrentaste a la
muerte, la venciste, y has dicho: “Yo soy la resurrección y la vida; el que
cree en mí, aunque esté muerto vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no
morirá.”…
¡Ayúdame en mi incredulidad!
¡Enséñame a hablar contigo! ¡Eres mi Salvador! ¡Sí creo que resucitaste de entre
los muertos! ¡Perdona mis faltas, entra en mi corazón y toma el control de mi
vida!... https://www.youtube.com/watch?v=lrRKQWDL5fg
¡Dios te ama, a pesar de
todo! ¡y yo también te amo!+++***+++
¡Comparte el mensaje!
¡Quizás lleves la luz que está necesitando alguien a quien amas!
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